Ser caballero

Cuando era niño jugaba a que era un caballero.

Mi armadura era la caja de cartón de la aspiradora.

Mi casco el recipiente para lavar la ensalada.

Mi montura el lampazo para lustrar la entrada de mi casa.

Y mi espada era la regla de la escuela de mi hermana.

 

Cuando era niño jugaba a que era un caballero.

Me desataba en guerras interminables

contra los sillones del living de mi casa.

Peleaba junto a mi hermano,

contra los enemigos de nuestra infancia.

Pero ellos al final ganaron la batalla.

 

Cuando era un niño jugaba a que era un caballero.

Tenía el honor, la doncella y la espada.

Nada mas quería, nada mas me faltaba.

Lo único que anhelaba estaba ahí,

y allí se realizaba.

 

Cuando era un niño jugaba a que era un caballero.

Me adentraba en un mundo que sólo me admiraba.

Ellos solo deseaban, que fuera su guerrero y su protector.

Que los defendiera de los embates del enemigo

que los quería hacer desaparecer.

Que avanzaba con sus temibles huestes al grito de:

“Es hora de crecer”.

 

Cuando era un niño jugaba a que era un caballero.

Eso era cuando era niño.

 

Cuando era un niño jugaba a que era un caballero,

ahora que soy grande juego a que soy un niño y cada tanto,

cuando vuelvo a ser niño, me convierto en Caballero.

8 comentarios en “Ser caballero

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s